ACOM sale victorioso frente al intento de intimidación del abogado Gonzalo Boye
ACOM sale victorioso frente al intento de intimidación del abogado Gonzalo Boye
La querella presentada por el Comité de Solidaridad con la Causa Árabe (CSCA) contra Angel Mas, Presidente de ACOM, queda archivada debido a que ninguno de los hechos descritos justificaban la comisión del delito denunciado.
El abogado de la acusación, Gonzalo Boye fracasa en su intento de acallar la lucha contra el movimiento antisemita BDS en España.
Madrid, 5 de febrero de 2019
En octubre de 2017 el Comité de Solidaridad con la Causa Árabe (CSCA) presentó una querella contra Angel Mas, Presidente de ACOM, por un delito de incitación al odio y contra ACOM por asociación ilícita.
La querella fue desestimada en primera instancia el 3 de octubre de 2018 por el Juzgado de instrucción número 7 de Madrid y definitivamente archivada por la sección número 1 de la Audiencia Provincial de Madrid el 14 de diciembre de 2018 tras la apelación del querellante.
El CSCA contó con el abogado Gonzalo Boye y su gabinete como letrados de la acusación y aspiraba a una condena que podría haber significado una pena de prisión de hasta cuatro años para Angel Mas y la ilegalización de la organización que lucha más exitosamente contra el antisemitismo en España.
CSCA, es una organización radical de origen asturiano, que sobrevive con las subvenciones de instituciones públicas y ayuntamientos. Con ellos financia, bajo una excusa solidaria, proyectos que buscan la discriminacion contra los judios, la incitación al odio e incluso la glorificación del terrorismo.
Boye es conocido haber sido condenado por colaborar con ETA en el secuestro de Emiliano Revilla. Fue y es abogado de narcos y terroristas y figura clave del acoso legal a Israel, con vínculos con grupos palestinos radicales. En los últimos meses su nombre surgió por participar en la farsa legal del prófugo Carles Puigdemont.
La estrategia subyacente en la querella de Boyé era, no sólo desactivar la resistencia de ACOM a los ataques contra los judíos por parte de grupos BDS afines a Podemos, sino que adicionalmente pretendía:
– criminalizar la mera existencia de Israel como estado y por tanto a cualquiera que lo apoye.
– confundir el ejercicio de la defensa legal contra la discriminación antisemita con una supuesta intimidación ejercida por las propias víctimas de la discriminación.
– equiparar las críticas al antisemitismo de los grupos BDS y a la glorificación del terrorismo por instituciones y autoridades palestinas con la incitación al odio contra todos los palestinos.
Este ataque contra ACOM es una clara represalia por su éxito contra el Movimiento BDS en los tribunales, donde ha ganado treinta y seis casos, sin perder ninguno, en contra de las mociones discriminatorias contra Israel y los judíos que ese movimiento podemita ha promovido en ayuntamientos, cabildos insulares, diputaciones y regiones españolas.